Más de 40 asistentes participaron en la última ruta de senderismo organizada por el Círculo Mercantil al Peñón de Algámitas. Una experiencia, como siempre, inolvidable.
Nuestro guía oficial de senderismo, Tato, nos cuenta la experiencia de la pasada ruta de senderismo a la que asistieron 44 personas que disfrutaron de una subida no exenta de emociones y paisajes preciosos. Desde arriba en visión 360 º los senderistas tuvieron la oportunidad de divisar grandes extensiones con poblaciones de las provincias de Sevilla, Cádiz y Málaga.
“Esta ruta, que figuraba como de nivel medio, ha sido quizás, una de las más interesantes de los últimos meses según las opiniones recibidas directamente de varios de los asistentes.
La salida en el bus a las 8, por no ser lejos. Se está convirtiendo en costumbre llevar socios de los 3 clubs del río: Mercantil, Náutico y Labradores, aparte de invitados.
Temíamos que la celebración de la maratón al día siguiente nos podría cortar la salida de la ciudad, pero el conductor supo solventarlo.
Cogimos la A-92 hasta Osuna, cerca de donde desayunamos en una parada de esas donde nos juntamos cinco autobuses con el nuestro. Menos mal que en estos sitios están acostumbrados y fue algo rápido.
A partir de ahí nos desviamos por la comarcal que va a El Saucejo y luego hasta Algámitas. Muchas curvas.
Llegamos al camping "El Peñón", donde comenzamos a caminar y, nada más salir de las instalaciones de éste, estábamos ya metidos de lleno en un fantástico bosque, denso, lleno de musgo, helechos, rocas enormes, árboles y matorral a través del que una maraña de sendas y veredas marcadas con cartelitos numerándolas, te iba guiando hacia las partes altas de la montaña.
En un cruce de caminos bajo una impresionante pared vertical, un cartel indicaba uno que te llevaba a una zona de especial dificultad, pues había que trepar un lateral de aquella sujetándose a unas cadenas instaladas en la roca. Pero ya lo había descartado en mi visita previa, dos semanas antes.
Así, continuamos rodeando la peña cada vez más arriba, hasta llegar a un tramo con más pendiente que hizo a los que venían un poco menos seguros, temer no ser capaces de llegar a nuestra meta. En esta parte con afloramientos de roca, hubo que ayudar a la abuela del grupo, a su pesar, o se quedaría allí; al igual que a algunos otros no tan veteranos.
Finalmente, accedimos al hombro del peñón y allí, tras hacer una pequeña ascensión a cima por parte de unos cuantos más animosos y un buen montón de fotos en derredor, nos sentamos a comer el bocata. La bajada sólo planteó el problema de un invitado al que su bota se había quedado sin suela y hubo que sujetársela con cuerdas.
Una vez en el bus, volvimos a parar para un café en el regreso y a Sevilla.”
Nuestros socios esperan con ganas la siguiente ruta propuesta por la sección de Senderismo del Círculo Mercantil.