Nuestra deportista nos cuenta cómo le ha ido en los primeros entrenamientos con la selección absoluta de natación artística y su vida en el CAR San Cugat
Parece que fue ayer cuando Aurora Lázaro protagonizó uno de los momentos más emotivos de la temporada. Sus lágrimas en la exhibición de natación artística, un abrazo con sus entrenadoras que sellaba un vínculo irrompible, todo el Círculo Mercantil aplaudiéndole por todos los años en los que la han visto crecer y convertirse en lo que es: una deportista de élite. Y apenas tuvo tiempo para procesarlo.
Al día siguiente se celebró la Gala del Deporte del Círculo Mercantil, donde fue reconocida con una mención especial, y al otro ya estaba cogiendo un avión para irse a Barcelona, al CAR San Cugat, a su nuevo hogar junto al conjunto nacional de natación artística.
A sus 18 años, Aurora nunca había vivido fuera de casa. “Es duro, ya que, al final, te estás separando de tu familia y amigos con los que has pasado toda tu vida”, nos confiesa la deportista sevillana. Sin embargo, nos cuenta que lo está llevando mejor de lo que pensaba: “tengo a mis amigos aquí, que hacen un poco el papel de familia, al igual que los trabajadores, que nos facilitan la vida”.
Al final, ella misma nos reconoce que lo de “vivir sola” es muy relativo. “La organización en el CAR es impresionante y te ayudan todo lo posible para que no tengas que preocuparte de nada. A los internos nos ayudan con casi todo. Lo único que tengo que hacer yo es la cama, con eso te digo todo”, declara Aurora entre risas.
La vida deportiva
Obviamente, todas estas facilidades son para que los deportistas estén plenamente cómodos para dar después el 100% en los entrenamientos. “Están siendo duros, y es normal, ya que es otro nivel de exigencia. Pero me están gustando porque no solo estoy aprendiendo técnicamente, que también, sino que estoy viendo la natación artística desde una perspectiva que nunca había conocido, gracias sobre todo a mi entrenadora Andrea Fuentes”.
De hecho, la misma Aurora nos reconoce lo atípicos que son, aunque todo con un sentido. Para salir de la zona de confort, practican otras disciplinas. “Gracias a esto, estamos aprendiendo a trabajar con gravedad para después trasladarlo al agua”.
También ella ha tenido que hacer un esfuerzo extra para adaptarse a este tipo de entrenamientos. Al fin y al cabo, en el Círculo Mercantil entrenaba alrededor de cuatro horas a diario por la tarde, pero ahora son ocho por la mañana, seis días a la semana (solo descansa los domingos). Aun así, “conforme han ido pasando los días, he sabido aclimatarme, ya que cuando vas con ganas, todo se hace mucho más fácil”.
Ella prefiere tener los pies en la tierra, pero nos menciona que sus entrenadoras ya le comentan que están viendo cómo progresa y “eso me motiva más”.
Su nueva vida
Aurora no solo ha comenzado una nueva etapa de su carrera deportiva, también de la académica. Ha comenzado el grado de publicidad de la Universidad Internacional de La Rioja y está muy contenta por las facilidades que le dan para compatibilizar los entrenos por la mañana y los estudios por la tarde. Al ser todo online, tiene las clases grabadas y puede estar así al día.
Además, como mencionaba al inicio, el apoyo que está recibiendo la ayuda tanto dentro como fuera de la piscina. “El nuevo equipo se preocupa mucho por mí, tanto compañeras como entrenadoras, como si fuera su hija. Tenemos una gran relación y la confianza suficiente para contarnos todo”.
En definitiva, Aurora nos confirma que está viviendo un sueño, pero sigue con esa ambición que siempre la ha impulsado. “Me he marcado como objetivo ir al Mundial absoluto de Singapur. Entiendo que somos dieciséis con el mismo objetivo y que yo soy la nueva y la pequeña. Me queda mucho por aprender y mejorar, pero eso no me detiene para dar mi mejor versión, de luchar por un puesto en el Mundial”.
Nos alegra enormemente saber que estás integrada y progresando con la selección absoluta. El Círculo Mercantil siempre te animará desde Sevilla y estamos convencidos de que alcanzarás tus objetivos con trabajo y esfuerzo, como siempre te hemos visto desde chica.
