Estas obras de reforma y adecuación de las cocinas y de impermeabilización de las cubiertas del edificio suponen una importante mejora que, con toda seguridad, repercutirá en un mejor servicio y una mejor calidad de los productos y especialidades de restauración.
Tras un minucioso estudio de las necesidades actuales y las que posiblemente se presenten en el futuro, se elaboró un proyecto que además de contemplar este la mejora en el servicio tuviera en cuenta la normativa actual en este tipo de instalaciones, para ofrecer a los socios las mayores garantías de higiene y calidad en los productos que se vayan a elaborar en ella. Se incorporan, por tanto, 4 cámaras independientes que garantizan el mantenimiento de la cadena de frío de los alimentos tanto frescos como elaborados. La última de ellas en la cual se preparan los alimentos crudos antes de la cocción, dispone de un ventanal que permite ver la cocina mientras se trabaja dentro de ella a una temperatura controlada. La cocina en sí mismo dispondrá de un moderno tren de lavado a alta temperatura, que desinfectará el menaje y la vajilla evitando que se generen microorganismos. Toda la sala de la cocina está climatizada y dispondrá de un ventanal que permitirá a los socios ver su interior desde el bar.
En cuanto a los trabajos que se están llevando a cabo en la cubierta del Edificio Social sobre el área que ocupan la cocina, el office y los vestuarios de personal, una vez retiradas las sucesivas capas de impermeabilizantes aplicadas a lo largo de los últimos 45 años, se ha procedido a sanear toda la superficie, reparar aquellas partes que presentaban desconchones, agujeros y grietas, se han reconstruido los 9 tragaluces que proporcionan luz natural al interior de las cocinas y se ha construido una estructura de acero que unificará todas las instalaciones de climatización y salidas de humos del edificio. Estos aparatos irán ocultos tras unos paneles tipo “mallorquina” para que no se vean desde el exterior.
Las obras han sufrido alguna demora en los últimos días debido a las lluvias, si bien se sigue contemplando el Puente de la Inmaculada, como fecha de reapertura tanto del bar como de las cocinas.