Rocío del Valle, deportista de la sección de piragüismo, competirá del 15 al 24 de junio en el Campeonato del Mundo Universitario de Dragon Boat en las ciudades de Lianyungang y Chifeng (China).
Dragon Boat es una modalidad deportiva de origen chino. “Todos los palistas deben acompasar las paladas al ritmo que marque el tambor situado en la proa de la embarcación, mientras que en la popa se sitúa un timonel encargado de llevar la dirección del barco”. La globalización ha hecho que este deporte se extienda por todo el mundo y cada vez hay más aficionados en nuestro país. Tal es el caso de nuestra ciudad que, gracias a la iniciativa de la Asociación Dársena Deportiva de Sevilla y la Universidad Pablo de Olavide, estará representada en este mundial por 14 palistas de diferentes clubes locales, entre los que estarán, Rocío del Valle, palista del Mercantil, seleccionada entre más de 40 candidatos que se presentaron a las pruebas.
La aventura de esta socia, aficionada al piragüismo desde muy pequeña, comenzará en tan sólo unos días, cuando embarque destino a China para participar en este mundial donde competirán con doce universidades, seis de ellas chinas, y otras de Noruega, Estados Unidos o Alemania.
Confiesa que al principio no estaba nerviosa, pero “según se va acercando la fecha empiezo a estarlo”. No es para menos. Conocemos un poco más su trayectoria a través de esta entrevista:
- Rocío, ¿cuál ha sido tu trayectoria como piragüista del Mercantil?
Empecé muy pequeña, con 11 años, en los cursillos de verano que se imparten en el club. Tenía algunos amigos mayores que remaban, y, como yo nadaba bien, me animé a probar. Mis amigas del colegio me decían lo típico de “¿y no te da asco el río? ¡Si el agua está verde! ¡Y hay bichos!”.
Fue un deporte que rápidamente me atrapó, y estuve compitiendo a nivel nacional durante 15 años. Posteriormente, los estudios y el trabajo me obligaron a dejar de practicarlo. Hará unos cinco años lo retomé de forma casual. Volví a engancharme, y de nuevo, a competir bajo los colores del Círculo Mercantil.
- ¿Cuántos participantes sois en total y de cuántos países diferentes?
Competimos doce universidades, seis de las cuales son chinas y el resto universidades de Italia, Noruega, Estados Unidos, Suecia, Alemania y representando a España nosotros, por la Universidad Pablo de Olavide.
- ¿Cómo te introdujiste en este deporte?
Mi aventura con esta modalidad se inicia a raíz de una reunión con Jose Luis Hernández, un compañero piragüista, en la que me comenta su iniciativa de preparar un barco femenino andaluz que represente a España en el próximo mundial de Dragon Boat en 2019, que esperamos se celebre en Sevilla. Es un proyecto que me ilusiona mucho.
- Es de suponer que se trata de uno de los máximos exponentes del deporte en equipo, ¿cómo os sincronizáis los 14 deportistas que competiréis?
Al principio pensaba que iba a ser muy complicado ya que, en el piragüismo de pista, un K4 con cuatro personas es la embarcación con mayor número de palistas. Pero en Dragon Boat al ser tantos es bastante divertido. En esta ocasión se trata de un barco mixto, 4 mujeres y 6 hombres que remamos cinco a cada lado, una chica de tambor y otro compañero que lleva el timón. El ritmo lo marca el “tambor". Esta compañera, que va sentada en la proa, va marcando las paladas y animándonos a golpe de tambor.
- ¿Cómo fue el momento en que te propusieron este gran reto de representar a la UPO en el Campeonato del Mundo Universitario?
Fue a través de la Asociación Dársena Deportiva de Sevilla. Su presidente, José Viñas, lanzó la convocatoria entre piragüistas y estudiantes. Al ver que cumplía con todos los requisitos necesarios me presenté a la selección. Fuimos 14 los seleccionados entre más de 40 candidatos.
- ¿Hay posibilidades de ganar o los asiáticos aún llevan mucha ventaja?
Nuestra intención es llegar a lo más alto, hacer podio.
Es la primera vez que nos medimos en esta disciplina, pero los piragüistas somos muy competitivos. Todos los integrantes de esta embarcación estamos acostumbrados a competir y vamos a ponérselo muy difícil al resto de rivales.
Estoy muy ilusionada y confío en dejar el pabellón sevillano muy alto.
Deseamos mucha suerte a esta gran deportista y al resto de participantes y, por supuesto, al equipo técnico que les acompañará, formado Germán García Gutiérrez, entrenador del Club Náutico Sevilla y la profesora de la Universidad Pablo de Olavide, Virginia Alcaraz Rodríguez.