Los 16 niños y niñas que viven en el Hogar se integrarán en las actividades deportivas junto a los socios.
Desde hace cuatro años, el Hogar de Nazaret San Joaquin hace una callada labor social y humanitaria, que afronta desde las donaciones y la ilusión. 16 niños y niñas de entre 2 y 16 años viven en este lugar y han encontrado un hogar y un apoyo en unos duros momentos en los que necesitaban una tabla de salvación que diera respuesta a situaciones familiares muy complicadas.
A lo largo de estos cuatro años, el Hogar de Nazaret ha sido un refugio en el que educar y cuidar a los niños mientras sus progenitores, algunos sin familia cercana y con graves problemas, solucionaban sus respectivas situaciones para después poder retomar la educación y el cuidado de los pequeños.
La premisa de los responsables del Hogar es que los niños se sientan como en casa, tanto en el aspecto entrañable como en el de la disciplina. Otra tarea importante que desarrollan es la de acompañamiento a las madres y familiares de los niños acogidos, que en muchas ocasiones tienen problemas sociales y de salud.
El Circulo Mercantil e Industrial de Sevilla ha querido que el Hogar de Nazaret sea el destino de las recaudaciones y campañas que se desarrollen durante todo el año conmemorativo del 150 aniversario, pues sacar adelante un proyecto de estas características no es tarea fácil ni sencilla. Pero la apuesta va a ir más allá de la ayuda económica, ya que se becarán a los niños y niñas de Nazaret para que disfruten de las actividades deportivas y convocatorias de ocio. El objetivo es que se integren y se les ayude a potenciar sus capacidades físicas y sociales, ésas que quizás se hayan resentido por los problemas sufridos a pesar de sus cortas edades y que están a tiempo de potenciar en nuestras instalaciones, rodeados del afecto de todos.